Acabamos el año con una de las entradas más importantes en cuanto a salud, bienestar, indemnizaciones, consecuencias y secuelas; hablamos de las lesiones cervicales en accidentes de tráfico.
Estas son de las más graves y cuyo tratamiento resulta esencial para el bienestar futuro. En muchas ocasiones, el no darle la importancia que merecen o incluso no diagnosticarlas a tiempo hace que los efectos sufridos se den a muy largo plazo y que también la indemnización correspondiente al tipo de daño no sea la que recibimos realmente por aparentar sufrir un mal menor. Vamos a verlas y salimos de dudas.
Esguince cervical
Es de las lesiones cervicales en accidentes de tráfico más comunes que podemos encontrar.
- ¿Qué es?
Se da esta denominación al desgarro de cualquier ligamento cervical u otra parte blanda de la zona de las cervicales.
- Sintomatología
Cuando se sufre, se da rigidez y un dolor que va de moderado a intenso. Este, con frecuencia, se alarga hasta el hombro, aunque sea una zona no afectada directamente.
Otros síntomas menos comunes pero no extraños son los mareos, los vértigos y el hormigueo de brazos y manos.
- Diagnosis
La imagenología no permite discernir entre una afectación de los ligamentos, los músculos o los tendones. Por ello, el diagnóstico se basa en lo que el paciente cuenta y una exploración que incluye palpación reactiva.
- Tratamiento
En primera instancia, el paciente va a recibir una dosis de analgésicos que variará en función del grado de dolor que se presente. En la primera visita al centro médico es posible que se administre en inyectable, junto con antiiflamatorios y relajante muscular. Después, se recetan comprimidos.
Para calmar la zona se aconseja la aplicación de compresas en la zona, alternando frío y calor.
Sobre el uso del collarín, las corrientes están completamente divididas. Este sí será necesario es los casos de gravedad patente, a modo de prevención de latigazos o malos movimientos. Veamos qué opinan en el canal de Medicable sobre el tema.
En muchos casos, la visita al fisioterapeuta se vuelve necesaria o, como mínimo, aconsejable.
Rectificación de la lordosis cervical
La lordosis cervical es la curva natural de nuestra columna vertebral.
- ¿Qué es?
La rectificación de la lordosis cervical no es más que una modificación de esta construcción ósea normal, es decir, se modifica el dibujo de la columna vertebral.
En la mayoría de los casos, lo que ocurre es que el centro de gravedad de nuestro cráneo se desplaza. Ello supone que la carga que soporta la musculatura de la zona se multiplique.
- Sintomatología
El dolor en el cuello es constante si sufres este padecimiento. Otros síntomas que se presentarán en distinto grado y en función de la gravedad del desplazamiento son el dolor de cabeza, los mareos y, con el tiempo y/o si no se trata bien la lesión, un desgaste de los discos prematuros así como artrosis cervical o una hernia en la zona.
- Diagnosis
Ante la sospecha de su padecimiento, se recurre a la realización de una radiografía de la zona. Esta se hace en una toma lateral. Si se da la lesión, la radiografía la mostrará sin lugar a dudas.
- Tratamiento
Para tratar la que es una de la lesiones cervicales en accidentes de tráfico más comunes se recomiendan las sesiones de fisioterapia. Los ejercicios prescritos y realizados en consulta aliviarán notablente el malestar y parte del dolor, al menos temporalmente.
El control postural, por supuesto, se vuelve totalmente necesario.
Hernia discal cervical
Aumentando en gravedad nos encontramos con la hernia discal cervical. Así como una hernia inguinal puede ser asintomática a excepción de su abultamiento, la cervical sí suele llegar a ser muy grave.
- ¿Qué es?
De manera convencional, en el lugar que queda entre cada una de nuestras vértebras se encuentra un núcleo pulposo. Este no es otra cosa más que la zona interna de los discos vertebrales. En él encontramos un líquido almacenado.
Una hernia es una protuberancia que aparece en nuestro organismo fruto de la descolocación de ese líquido o de alguna otra parte de un disco cervical, que pasa a presionar uno de los nervios adyacentes.
- Sintomatología
Por supuesto, se da un fuerte dolor en la zona cervical y en distintas zonas del brazo o de los brazos. Dependiendo de la vértebra afectada, y de los nervios pulsados, el resto de síntomas es variable. Cuando las afectadas son la C4 y la C5 es común el sentir hormigueo así como entumecimiento en la zona alta de los brazos. Esta es la situación más convencional; si bien, si se ven afectados otros huesos de la columna el hormigueo se desplazará a otras partes del cuerpo. También es común sufrir debilidad muscular y entumecimiento.
Cabe mencionar que si ya se ha sufrido una hernia de disco cervical es posible que el pinzamiento sea mucho menos doloroso de manera que puede llegar a confundirnos creyendo que se trata de una lesión que reviste menor gravedad.
- Diagnosis
El diagnóstico de la hernia de disco es sencillo; se puede realizar después de haberse hecho el paciente una resonancia magnética; no se necesita más.
- Tratamiento
El tratamiento de esta lesión sí es bastante variable en función de la sintomatología y las zonas afectadas. Este para por quiropraxia, esteroides, fisioterapia y, por supuesto, analgésicos y relajantes.
Luxación cervical
También conocida como luxación Atlanto-Axoidea, esta es otra de las lesiones cervicales en accidentes de tráfico que más se suelen ver y reclamar.
- ¿Qué es?
Consiste en la separación de dos huesos sin que se dé rotura de ninguna de sus partes. Ello se produce porque el ligamento encargado de mantenerlos unidos no puede cumplir su función. Comúnmente se da en la primera y segunda vértebra.
- Sintomatología
Esta separación produce una inflamación inmediata la cual, a su vez, producirá un significativo dolor.
El verdadero problema no es este dolor, que sí reviste importancia pero que es tratable y perfectamente soportable. La gravedad se da cuando la odontoides (que es la protuberancia de la segunda vértebra) comprime la médula cervical. En este caso la consecuencias sí son muy graves. Las luxaciones cervicales se han asociado a la embolia cerebral, problemas vasculares y pueden terminar por producir la muerte.
Además, hasta que esta protuberancia encuentra un lugar de asiento puede ir “tocando botones” y, con ello, provocar paresia o pinzamiento arterial.
- Diagnosis
Un diagnóstico temprano es esencial para poder comenzar a dar un tratamiento efectivo pues, como hemos comentado, las consecuencias pueden ser mortales.
Para ello se hacen diversas pruebas de imagen como un escáner, radiografías o resonancias. En los casos de accidente muy reciente es posible que sea necesaria una gammagrafía, que detecta las luxaciones antes de que sean visibles mediante otros exámenes.
- Tratamiento
La inmovilización cervical es la solución por excelencia. Si bien, cada caso requiere de un tratamiento diferente en función del estado en que se encuentre el paciente y, por supuesto, de la gravedad de la luxación. El tratamiento menos conservador pasa por cirugía, el cual es completamente recomendable teniendo en cuenta las consecuencias.
Otros problemas en la zona
Existen otras dos patologías que muchas personas tratan como lesión pero que realmente no lo son. Este aspecto es importante destacarlo puesto que las consecuencias, obviamente, no son las mismas.
Latigazo cervical
El latigazo en sí no es una lesión sino el fenómeno que las produce. Es decir, este es la causa de las lesiones. Es fruto de un movimiento brusco en el que se da una rápida flexión y extensión de una zona del cuerpo. Así, son los accidentes de tránsito un fenómeno perfecto para que se produzcan debido a los cambios tan bruscos de velocidad.
Lo habitual es que dé lugar a una contractura y, con ello, limitación de la movilidad, acúfenos, cefaleas…
Veamos una explicación mucho más detallada de este fenómeno en el siguiente vídeo.
Cervialgia postraumática
La cervialgia no es más que el dolor que se da en la zona cervical tras sufrir un traumatismo de cualquier tipo. Se da, por supuesto, como síntoma de cualquiera de las lesiones comentadas o de cualquier otra. Sin embargo, puede ser consecuencia directa del accidente, sin que exista ninguna lesión; simplemente sentimos dolor.
Accidentes de tráfico y lesiones cervicales
Independientemente del grado de dolor que se sienta en el momento del accidente de tránsito, es esencial, como bien decíamos en nuestra entrada sobre cómo proceder para iniciar una reclamación, acudir a un centro médico para recibir valoración y tratamiento así como pruebas que den fecha y hora a tu dolencia.
En una próxima entrada hablaremos también de cómo comenzar este proceso en específico si sufres alguna de estas lesiones que, como hemos visto, pueden a ser irreversibles en algunos casos.
Por supuesto, nuestro consejo principal es que te pongas en manos de un buen abogado y que no dudes en recurrir a la redacción de un informe de biomecánica, que es el que prueba la relación que existe entre los daños materiales producidos a los vehículos y otros elementos implicados con los daños físicos que puedas presentar.
¿Alguna vez has sufrido alguna de estas lesiones cervicales en accidentes de tráfico comunes?
Deja una respuesta