En Barcelona, hace unos meses, quedamos verdaderamente sorprendidos cuando entramos a testificar en un procedimiento civil de tráfico, -justo en fase de pruebas- donde éramos los primeros Peritos testigo en declarar.
Al ponerme de pié, nuestro letrado me miró fijamente y empezó a interrogarme. He de confesar que en este momento me sentí intimidado porque hablaba con una seguridad, con una frescura, y con una garra que no había visto antes!.
Se desplazaba entre las palabras y los interrogatorios con una arrogancia y una contundencia total ! sobre todo, percibí que estaba decidido a llegar hasta el mismo fondo de todas y cada una de las cuestiones en polémica.
Su método de interrogatorio consistía en ir punto por punto desgranando cada uno de los elementos del informe epígrafe a epígrafe.
“¿Por qué motivo ponen Uds. en su informe las conclusiones al principio?”
Luego empezó a preguntar sobre la reconstrucción visual fotograma a fotograma que incluia ese informe, donde se podía observar paso a paso como ocurrió exactamente el accidente, como si estuvieras viendo una película, cuando el conductor estaba a 100 metros del lugar de colisión,cuando estaba a 50 metros , a 25 metros , a 15 a 10 etc
Después -ni corto ni perezoso- continuó con las fórmulas de cálculo hasta terminar con el informe completo.
Desconozco el motivo por el que fué tan exhaustivo, pero he de confesarte que los Peritos Ingenieros no estamos acostumbrados a que nuestro propio abogado haga un repaso total del informe. Más bien estamos acostumbrados a que el abogado contrario profundice un poquito.. y sobre la marcha se vayan todos a las conclusiones y ya está.
¿Te ha pasado alguna vez esto en el acto del juicio?
Cuando mi abogado concluyó su alegato final, pensé que todos iban a aplaudir, de hecho hasta el propio juez lo miraba con simpatía.
Terminado el juicio, me acerqué y en voz baja le pregunté que de donde sacaba energías para mostrarse tan decidido y mordaz al hablar en público.
Y este me confesó que el secreto de un buen abogado para hablar en el acto del juicio está en la seguridad que tenía en todo lo que decía. Que las intensas reuniones que mantuvo con nosotros para prepararse este juicio, también las tuvo con los otros peritos médicos, y que manejar esta información de forma tan fluida le daba una seguridad absoluta a la hora de expresarse.
El resultado del juicio fue muy positivo, y los mas curioso es que tanto el cliente como los peritos de esta parte, salimos del acto del juicio con una sonrisa en el semblante.
Un juicio que podía haber durado un día completo, este abogado lo celebró en menos de dos horas. Interrogando con una seguridad y una corrección y una madurez absoluta.
He de matizar que no me gustaría verlo de contrario, porque como se dice en mi tierra, el hombre iba a más de 200 km/h.
¿Crees que preparar a fondo tus juicios con tus peritos, te permite ganar más rápido y mejor?
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