Recientemente se ha resuelto el caso de una demanda interpuesta por un cliente a su abogado en la que, al utilizar una grabación de voz como prueba, conseguía probar que el profesional quería cobrar por sus servicios un precio diferente y superior al comentado a su cliente con anterioridad.
El caso de Pontevedra
El cliente, aportando como prueba una grabación de voz en la que se podía escuchar la conversación que mantenía con el letrado y en la cual este detallaba el precio de cada uno de los servicios que se iban a llevar a cabo para la resolución del caso en cuestión, conseguía probar cómo su abogado pretendía cobrarle un precio más alto al pactado.
La Audiencia Provincial de Pontevedra tomaba como válida esta prueba y terminaba por dar la razón al cliente, sirviendo la grabación para probar el importe de los honorarios que el letrado había indicado libremente cuando el cliente solicitó dicha información.
Los motivos por los que fue válido utilizar una grabación de voz como prueba
Para que una grabación de voz sea legal deben darse varios supuestos, entre ellos, que no se vulneren ciertos aspectos como son el derecho a la intimidad, el secreto de las comunicaciones o la Ley Orgánica de Protección de Datos.
En este caso, la Audiencia considera que la grabación no supone intromisión alguna en la intimidad del abogado, pues la conversación es puramente profesional, ni se está vulnerando su intimidad al ser el contenido supuestamente oficial, el correspondiente a las tarifas legales del profesional.
No es una cámara oculta, pues el filmador forma parte de la conversación, no se atiende a la vida privada del acusado y el contenido aportado como prueba no ha sido ni será distribuido a terceros, siendo su única utilidad la de aportar un fuerza a un testimonio.
Así mismo, las manifestaciones que se ofrecen en la prueba no fueron provocadas, el profesional comunicó libremente una información que se supone pública como es el caso, como decimos, de sus tarifas.
Tampoco participan terceras personas a las que se les pueda estar vulnerando, motivo por el cual se podría pedir la invalidación de la grabación como prueba. En la conversación sólo están presentes abogado y cliente, que conforman las dos partes de la demanda.
La Audiencia determina que el letrado hace una oferta que, aunque no está escrita, es vinculante por lo que será la cantidad final que su cliente deba pagarle por sus servicios.
Con esta noticia no queremos más que hacer ver a nuestros lectores cuál es la importancia de aportar pruebas válidas en un juicio. Por desgracia, muchas veces la razón no es suficiente si no está probada y son necesarias todo tipo de pruebas como los informes profesionales que en Peritos de Accidentes diseñamos, creamos y aportamos. Sólo de esta manera se puede hacer justicia con la certeza de obtener los mejores resultados.
¿Qué opinas de utilizar una grabación de voz como prueba en un juicio? ¿Crees que la Audiencia ha resuelto convenientemente el caso?
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