En esta ocasión vamos a entrar en detalle sobre qué es el ESP o control electrónico de estabilidad, uno de los más importantes avances tecnológicos para la seguridad en los vehículos desde hace mucho tiempo.
¿Qué es el ESP?
ESP es la sigla que hace referencia al control electrónico de estabilidad y como se le conoce comunmente. Lo que este sistema hace es mantener la trayectoria del vehículo que está marcando el volante.
El ESP incluye:
- Actuadores en el sistema de frenado.
- Unidad de control electrónico (UCE).
- Tres sensores:
- De ángulo de dirección. Ofrece información sobre el movimiento del volante desde la columna de dirección.
- De velocidad de giro. Dan información sobre bloqueos y se encuentran en las rueda.
- De ángulo de giro y aceleración transversal. Da información sobre cómo se comporta realmente el vehículo.
Lo que se consigue con ello no es otra cosa más que la reducción en el número de siniestros por derrape, con una disminución del riesgo de un 80%, algo que sólo supera el cinturón de seguridad.
Su funcionamiento
La unidad de control electrónico se encarga de revisar unas 25 veces por segundo la información de los sensores. Esta debe coincidir; si no es el caso, el ESP comprenderá que se ha creado una situación de riesgo.
Cuando esto ocurre el control electrónico de estabilidad se encarga de realizar una frenada con la rueda que corresponda o restando par motor.
De esta manera, la actuación del conductor se limitará a marcar una trayectoria con el volante; así, hará que el sistema interprete la situación. Eso sí, este no podrá obrar más allá de los lógicos límites de la física, es decir, no puede obrar milagros.
Veamos cómo lo muestra Bosch:
Para que el ESP sea realmente efectivo, se puede complementar con:
- Control adaptativo de la carga: Las variaciones de peso son identificadas y en función de estas se adaptan los sistemas de control, haciendo que las maniobras de giro y frenado estén en equilibrio con la masa que se mueve.
- Asistente hidráulico de freno: Este es capaz de percatarse de si pisamos el freno con mayor fuerza, entendiendo que existe la necesidad de una frenada importante y poniéndose en marcha para reducir la distancia de frenada.
- Control de arranque en pendientes: Un detector informa sobre el tipo de pendiente donde se desea realizar el arranque y el ESP actúa sobre los frenos en el instante el que tiene que cambiar el pie de pedal.
- Sistema de mantenimiento de carril: También se combina con este, que consiste en la aplicación de una leve frenada sobre la rueda correspondiente si el sistema detecta que estamos saliéndonos de nuestro carril.
- Control electrónico de la mitigación: Se monitorea la velocidad de las ruedas y, si se da peligro de vuelco, se reduce dicha velocidad de manera gradual para que recuperar el control del vehículo sea más sencillo.
Desconexión del ESP
Es posible desconctar el ESP, pero no siempre. Hay modelos de vehículos que lo permiten, otros que no y otros en los que se puede limitar su actuación. Destacar que habrá modelos en los que se conecte automáticamente al pasar de cierta velocidad.
No hay problema en hacerlo si es tu elección pero saber que se nos encenderá un testigo en el salpicadero.
¿Qué tal tu experiencia con el ESP? ¿Lo conocías? ¿Tu vehículo lo incluye?
Deja una respuesta