Cuantas veces te cuentan que “… tuve un accidente de tráfico, cuando estaba parado en un Ceda el Paso, el vehículo contrario me colisionó por alcance por no guardar la distancia de seguridad.. .” muchas ¿verdad?. [distance1]
De ahí que en la mayor parte de los casos de una colisión por alcance su causa sea la vulneración de la distancia de seguridad.[distance1]
Para evitar esto la norma establece que todo vehículo que circule detrás de otro habrá de hacerlo a una distancia que le permita detenerse en caso de frenado brusco, sin colisionar con él, teniendo en cuenta especialmente la velocidad, las condiciones de frenado y la adherencia.[distance1]
Lo que quiere decir que estos factores la velocidad que llevaba el vehículo, la adherencia de los neumáticos sobre el pavimento, el estado del vehículo, falta de visibilidad del conductor (lluvia, nieve, humos, niebla, etc. ) y al estado psicofísico del conductor hace que aumente esa distancia de seguridad.[distance1]
Por tanto, la distancia de seguridad es la suma entre la distancia de reacción y la distancia de frenado, o lo que es lo mismo, habría que sumar el tiempo que tarda nuestro cerebro en ver un posible peligro más el tiempo que se tarda en accionarse el pedal de freno del vehículo hasta que este se detiene por completo.[distance1]
Desde que nuestro cerebro detecta como un peligro al vehículo que va delante hasta que presiona el pedal del freno, todo esto en condiciones normales, transcurre prácticamente durante un segundo como media.[distance1]
Para prevenir posibles accidentes en la carretera por no guardar la distancia de seguridad, la Dirección General de Tráfico recomienda que se debe mantener una distancia de 3 segundos que es el tiempo que se utiliza para realizar una frenada de emergencia.[distance1]
El reglamento menciona que hay una separación mínima de 50 metros que deben respetar los vehículos pero que afecta solo a los vehículos de mercancías y vehículos de más de diez metros. No respetar dicha distancia se puede considerar una infracción del reglamento de la circulación. No obstante la distancia de seguridad se ha de incrementar en aquellos casos en los que las condiciones meteorológicas sean adversas, abarcando el espacio que nos permita detenernos con seguridad a pesar de las vicisitudes.[distance1]
Si no guardamos la distancia de seguridad no sólo ponemos en riesgo nuestra vida sino la de los demás, esto depende únicamente del conductor. [distance1]
Esto se solucionaría con la anticipación y la atención permanente a la conducción por parte de los conductores lo que garantizaría una mayor disposición frente a situaciones imprevistas que pudieran producirse debido al tráfico.[distance1]
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