Existe un aspecto esencial que determina, en buena medida, que disfrutemos o no de un alto grado de seguridad vial. Al igual que para conseguirlo es determinante la conducción, también lo son las características de la vía y el entorno. Para conseguir el más alto grado de confort en este aspecto se debería circular y transitar en lo que se conoce como calle completa; ¿sabes lo que es?
¿Qué incluye una calle completa?
La calle completa debe ser un espacio en el que cualquier persona, sea el tipo de usuario que sea, pueda acceder de manera segura, adecuada y cómoda y su destino.
Esta filosofía de urbanismo se está poniendo cada vez de moda debido, en primera instancia, a la razón de la propia descripción de calle completa, pero también a la viabilidad para que sea una realidad. Veamos en qué consiste.
Para comenzar, saber que el concepto nació por la necesidad de que las calles tuviesen más usos que el que la mayoría le atribuimos: que los automóviles circulen.
Esto hace que, inmediatamente, el resto de personas del campo circulatorio pierdan importancia, y es precisamente lo que se pretende evitar. Todas las personas deben gozar de igual importancia.
La construcción
Como puedes imaginar, aunque existan muchos aspectos a integrar en una calle completa, su diseño no es único. Pueden existir cuantiosas diferencias entre calles y avenidas o entre zonas urbanas o rurales; lo que se debe buscar siempre es atender las necesidades existentes.
En cualquier caso, veamos cuáles son esos aspectos comunes:
- Aceras bien configuradas: Se cuenta con paseos amplios en los que puedan caminar varias personas sin alterar su velocidad así como acceder a edificios sin toparse con otras personas. También dejan espacio a las terrazas de bares y cafés.
- Cruces seguros: Los pasos deben situarse en zonas donde no se formen embudos ni de personas ni de vehículos; por ejemplo, lejos de las intersecciones no reguladas. Además, estos deben adaptarse a las diferentes minusvalías incluyendo paneles accesibles, señales con audio, etc.
- Tráfico ligero y fluido: Es necesario reducir la velocidad máxima y recomendada de los vehículos a motor y cambiar por completo la manera de delimitar su espacio, con macetas esquinas de radio corto, medianas…
- Aparcamiento: Se debe optar por el aparcamiento en batería y en oblicuo invertido, de manera que, por un lado, se creen más plazas y, por otro, el acceso a la vía sea rápido y simple.
- Uso de bicicletas: Debe existir una infraestructura específica para el uso de bicicletas, de manera que su circulación no entorpezca la marcha de los vehículos a motor ni que se puedan ocasionar molestias a los peatones.
- Transporte público: Lo mismo ocurre con el transporte público. La menor cantidad de vehículos, la gran cantidad de paradas y su velocidad prudencial hace que, inevitablemente, las necesidades en la vía sean diferentes, de ahí que necesiten su propio espacio.
¿Qué te parece el concepto de calle completa? ¿Crees que está demasiado idealizado?
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